Reseña: A court of thorns and roses - Sarah J. Maas

Título: A court of thorns and roses
Título original: A court of thorns and roses
Saga: 1/3
Autor: Sarah J. Maas
Traductor: -
Editorial: Bloomsbury
Páginas: 416
Precio: 6,85€ (Amazon)
Sinopsis: When nineteen-year-old huntress Feyre kills a wolf in the woods, a beast-like creature arrives to demand retribution for it. Dragged to a treacherous magical land she only knows about from legends, Feyre discovers that her captor is not an animal, but Tamlin—one of the lethal, immortal faeries who once ruled their world. As she dwells on his estate, her feelings for Tamlin transform from icy hostility into a fiery passion that burns through every lie and warning she's been told about the beautiful, dangerous world of the Fae. But an ancient, wicked shadow grows over the faerie lands, and Feyre must find a way to stop it... or doom Tamlin—and his world—forever.

Este libro fue el elegido para la lectura conjunta del mes de septiembre de las Amebas Lectoras. En cuanto se publicó el pasado mayo quería comprármelo porque, a parte de ser de una autora que me gusta bastante, la historia es un retelling de la Bella y la Bestia, y a mi los retellings me encantan.

A court of thorns and roses (ACOTAR) comienza en un bosque, con Feyre, la protagonista, cazando para alimentar a su familia. El invierno ya ha llegado, por lo que los animales son cada vez más difíciles de encontrar y tiene que adentrarse mucho más en los bosques. Esa noche, mientras caza, se topa con un lobo gigante y a partir de la decisión que toma con respecto a él, su vida cambia radicalmente.

Feyre es imperfecta. Es errática, comete errores, actúa a veces de forma ilógica y sin pensar en las consecuencias. Y ahí radica su encanto. Ahí radica su realismo. Es una chica desconfiada, sin pelos en la lengua, testaruda y leal, sobre todo leal. Ha sido una protagonista con la que he podido identificarme y con la que he empatizado. Además, somos testigos de su evolución a lo largo de la obra. Al comienzo es una chica amargada, desconfiada de su propia sombra y llena de rabia. Sin embargo, poco a poco empieza a limar esas asperezas, esas partes de su personalidad que ha tenido que desarrollar para sobrevivir a la hambruna y a la pobreza extrema, y comienza a relajarse y a pensar un poco más en sí misma y en sus necesidades y aficiones. Tamlin, the beast, es un personaje que se puede encuadrar fácilmente dentro del príncipe de los cuentos que todas conocemos. Quizá un poco más salvaje y empotrador, pero por lo demás, es un perfecto caballero con su correspondiente exagerado sentido de la culpabilidad y sus buenos modales. Algo que me ha gustado mucho de ambos protagonistas es que no son inocentes, ni vírgenes. Ambos han tenido relaciones con otras personas, y no necesariamente porque estuviesen enamorados de ellas, simplemente para... desahogarse. He encontrado refrescante que ella no sea la típica niña estúpida y virginal, sino que sea ella la que, a veces, tenga que controlarse para no tirarse encima del tío de turno, y no al revés, como ocurre siempre.

Hay otros personajes secundarios que también tienen importancia en el desarrollo de la trama, como son Lucien, Rhys (un cabrón de esos que ponen mucho) o las hermanas de Feyre. Sin embargo, como personaje secundario cabría destacar Amarantha, la mala malísima de la historia. Es una High Fae guerrera, cruel, sangrienta, vengativa, ambiciosa, poderosa y con mucho rencor. Es una antagonista con un pasado bien construido y que actúa en consecuencia a su historia, no es mala porque sí. En general -con la excepción de algunos personajes como el padre de Feyre-, los personajes de esta historia están todos construidos con mucho esmero, con historias y vivencias que le confieren sus particulares personalidades.

Al ser principio de trilogía, el ritmo de la obra decaía en algunas ocasiones porque la autora se detenía a explicarnos cómo es ese reino de las hadas y a todas las razas de esta que iban apareciendo, así como la historia del mundo que ella ha creado. Sin embargo, el ritmo, en general, ha sido bastante vertiginoso y ha habido bastante acción a lo largo del libro. Por otro lado, yo no conocía la pluma de Sarah en su idioma original y ha sido un todo un placer descubrirla. Su narración es fluida, con un vocabulario muy exquisito y amplio que te sumerge en la historia con una facilidad pasmosa. 

La trama, por otro lado, es otro aspecto de la novela que me ha sorprendido y gustado. A pesar de ser un retelling de La Bella y la Bestia, Sarah ha conseguido darle a la historia un giro de 180º pero manteniendo, en su esencia, esos personajes tan entrañables que todos conocemos y esa maldición que la bruja le impone a la Bestia. Sin embargo, ha habido un par de cosas del desenlace de la obra que no me las esperaba por lo obvias que eran, ya que esperaba que la autora hiciera algo más novedoso y original para cerrar la trama de este primer libro.

En conclusión, A court of thorns and roses ha sido un primer libro de trilogía más que satisfactorio. Con una protagonista poderosa y valiente, una historia llena de hadas espantosas que recuerdan más a una pesadilla que a un cuento de hadas y una malvada que hace honor a su papel de antagonista, esta novela es más que recomendable.

Y vosotros, ¿lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¿Queréis leerlo?

¡Un saludo! ^^