Reseña: Morir no es tan fácil - Belinda Bauer

Título: Morir no es tan fácil

Título original: Rubbernecker

Saga: Autoconclusivo

Autora: Belinda Bauer

Traductor: Julia Osuna Agilar

Editorial: Roca

Páginas: 352

Precio: 18,90€

Sinopsis: El cuerpo que Patrick Ford está examinando en clase de anatomía intenta decirle que ha sido víctima de un asesinato. La vida ya es suficientemente extraña para el obsesivo Patrick, incluso antes de tratar de resolver un posible homicidio, ya que padece el síndrome de Asperger. Sin embargo, se verá obligado a unir las sutiles piezas de un rompecabezas a través de pistas silenciosas que gritan por existir. Realizará una sofisticada investigación que le hará sentirse vivo mientras tiene la muerte muy cerca

Gracias a la editorial por el ejemplar.

[sin spoilers]

Cuando empecé esta novela no sabía qué iba a encontrarme entre sus páginas. Tras un duro bloqueo lector, necesitaba un libro que me enganchase de verdad, que su trama y personajes me atraparan… y sin duda esta novela lo hizo. Pese a que siempre he renegado de la novela negra –no me preguntéis por qué, no lo sé, pensaba que este género no era para mí– he de decir que este libro me ha encantado de principio a fin y que sólo puedo decir cosas maravillosas de éste.

Morir no es tan fácil comienza con una profunda reflexión sobre la muerte, y nuestra autora lo compara con las rápidas y superficiales muertes en el cine. En el libro nos encontraremos con varios narradores, donde según su punto de vista nos contará la historia, dándole diferentes matices que con otro personaje no podíamos ver.

Primero nos presentan a Sam, el hombre que tuvo un accidente al principio del libro y acaba en coma. Me ha resultado curioso, incluso abrumador, ver desde su punto de vista cómo es tratado por médicos, enfermeras y familiares; inclusive como el mismo Sam no recuerda su vida y se aferra a un pasado que ya no existe. Esto me hizo ponerme en la piel de un paciente así y ver lo mucho que sufren, buscando una forma de salir de ese estado, pero no pueden. Me encariñé rápido con este personaje, pareciéndome real y cercano. Aunque me hubiera gustado conocerle un poco más, su papel en toda la novela es esencial.

Por otra parte tenemos a Tracy, una enfermera que comienza a trabajar en el ala de coma y se encarga de Sam. No he podido cogerle más asco a este personaje. Además de manchar el nombre de las enfermeras por el desprecio que le tiene a su trabajo y la forma de tratar a los pacientes, la personalidad de Tracy es horrorosa. Me ha parecido un personaje egoísta, aunque bien construido, pues sólo se preocupa por ella misma. Además de cierta cosa que pasa en el libro, no lo puedo decir porque es spoiler, hizo que le cogiera todavía más asco a este personaje hasta llevarme a odiarla. Esperaba que terminara sufriendo… pero me quedé con las ganas.

Y por último, tenemos a nuestro último personaje principal, aunque no el menos importante, pues el verdadero protagonista de toda la novela. Patrick ha sido un verdadero soplo de aire fresco. Me ha parecido un personaje esencial, increíblemente bien construido, real, profundo y de lo más interesante. Jamás había leído un libro donde el protagonista tuviera síndrome de Asperger, pero leerlo desde su punto de vista, sentir y ver las cosas como el las ve, las entiende y las siente, ha sido fantástico. Vivir la trama de esta historia de la mano de Patrick es lo mejor que la autora pudo hacer por el lector, pues la experiencia es única. Además de ayudarte a entender a este tipo de personas, que incluso puede llegar el punto de sacarte de quicio y ponerte de los nervios, Patrick hace que nos identifiquemos con él. 

La trama de esta novela gira en torno a Patrick, el cual está estudiando anatomía, y cuando descubre que el cadáver que está diseccionando en realidad no ha muerto de forma natural, todo su mundo se pone patas arriba. Este hecho va girando entre personajes, aquí y allá, dejándonos pistas que nos llevará a ese giro argumental que nos dejará patidifusos. Durante toda la novela te dejan con la sensación de que algo está ocurriendo, que el fallecimiento del cadáver es mucho más complicado de lo que parece, y la intriga que te deja cada página se acumula a esas ganas de saber qué está ocurriendo y porque nadie quiere que Patrick averigüe la verdad.

Los personajes son esenciales para esta novela, pues toman mucha importancia todos y cada uno de ellos. Desde los padres de Patrick, hasta sus amigos de clase de anatomía. Cualquier personaje secundario toma partido en algún punto de la trama, lo que hace que nadie éste de adorno y todos tengan su papel. 

Una de las cosas que más me ha gustado, a parte de su increíble trama, es la pluma de la autora. Es capaz de transportarte a cada escena, meterte dentro de la piel de cada personaje y sentir sus problemas como tuyos. Vivir la historia como si fueras parte de ella y no un simple lector observando desde fuera. 

En resumen, Morir no es tan fácil es una novela que te cautivará desde el principio, haciendo que no puedas despegarte de entre sus páginas. Con unos personajes reales, profundos y bien construidos, Belinda Bauer te sumerge en una trama llena de secretos, mentiras, amistad, misterio, superación y verdad, combinados de unos giros argumentales que te dejará más que sorprendido. Una increíble historia que se ha convertido en uno de mis libros favoritos del año y que recomiendo enormemente, pues esta novela se disfruta de principio a fin.

Y vosotros, ¿conocéis esta historia? ¿La habéis disfrutado? ¿Queréis hacerlo?

¡Feliz domingo!